¿Qué conflictos biológicos están relacionados a la aparición del Acné?

Si se padece de acné, necesariamente se viven conflictos de protección, de carácter estético, que son gestionados por la capa embrionaria de nuestro cerebro denominada Mesodermo Antiguo, del que dependen las glándulas sebáceas y la Dermis.

De allí que buscaremos situaciones que nos hablen de: preocupación, ataque o necesidad de preservar la integridad, conflictos de mancha, desfiguración, deformación o mancillamiento. También buscaremos ofensas reales o en sentido figurado. Y debemos prestar atención a la presencia de temor por la integridad corporal o querer protegerse de agresiones. Pudiendo todo esto ser de carácter real o simbólico.

Cuando la persona vive situaciones conflictivas, normalmente son recurrentes, con las características antes indicadas, el cerebro dirige grasa y agua al área que quiere proteger, como puede ser la cara (quizás porque nos sentimos feos, mancillados o burlados). Y pasado un tiempo, cuando entramos en la fase de reparación de ese conflicto, sobreviene la reducción por caseificación tuberculosa y se hacen visibles esas lesiones en piel que denominamos acné. En ese momento que aparecen las lesiones, vivimos de nuevo un conflicto por “sentirnos feos o desfigurados” y entramos así en un círculo vicioso.

Por ejemplo, un joven se acerca a dialogar con una chica que le gusta. Él tiene la impresión de que ella también siente gusto por él. Al siguiente día ve de forma sorpresiva a la misma muchacha tomada de la mano de otro chico. En ese instante el chico se siente mancillado en su propia “cara”, feo o poco atractivo. En ese momento se genera grasa y agua en la dermis buscando protegernos de esa “bofetada” emocional. Días después, pasado el conflicto, esa grasa y agua, ya no necesaria, será expulsada a través de la piel como materia amarillenta, compacta y granulosa, por supuesto con la presencia de inflamación y enrojecimiento. ¿Y qué pasa entonces, cuando el joven se observa las lesiones al mirarse en el espejo o, peor aun, comienza a sentir rechazo de su círculo de compañeros? Pues que revive el conflicto, una y otra vez, incrementándose los síntomas y haciéndose crónico el acné.

En la próxima entrega, continuaremos abordando este tema y considerando algunos elementos que nos pueden ayudar a solucionar definitivamente este problema.

Rafael EN BIO

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